29/12/2022
Por: Natalia Quiroga, subdirectora Enfermería
El día del TENS tuvo este año una connotación muy especial, no solo celebramos su día, sino que participamos de una intensa y maravillosa jornada sobre la compasión, dictada por ellos.
La compasión en nuestra Clínica es ir un paso más allá de la empatía; es movilizarnos a la acción para ayudar a aliviar el sufrimiento del otro. Significa también estar disponible, por lo que es parte de la relación terapéutica que establecemos con nuestros pacientes y sus familias.
Esta premisa quedó establecida en las presentaciones que se hicieron durante la jornada, y tomó diferentes dimensiones según el área que la abordaba. Como en el caso de Yasna Pinochet, de Neonatología, quien relató que la compasión es un valor central del cuidado diario, y que no es necesario estar en una situación excepcional para ejercerla. Nos entregó valiosas recomendaciones, muy concretas, como el contacto visual con el paciente, la honestidad en nuestras palabras y la constante validación de los sentimientos del otro.
La Unidad de Rescate, en la voz de Cristián Lucero y Guillermo Araya, nos ilustró cómo el trabajo bien hecho y la centralidad en el paciente y su familia se viven no solo en la atención directa prehospitalaria, sino que también en el rol de regulador de rescate.
Nicolás Cárcamo y Luis Quezada, de Salud Mental, nos enseñaron que el ejercicio de la compasión también nos hace mejores personas, requiere autoconocimiento y nos hace más humildes. Se puede desarrollar, si así nos lo proponemos, y también debemos ser compasivos con nosotros mismos, conocernos para darnos a los otros.
También nos hablaron sobre la relación entre TENS y paciente, una relación terapéutica; que el vínculo con la persona puede ser tan o más poderoso que un ansiolítico, y que este trato puede tener un impacto en los resultados de nuestros pacientes.
Daniela Véliz y Denisse Nuñez, de Centro Médico, abordaron la compasión desde su trabajo en la ecografía ambulatoria, donde también se puede ser compasivo, en un contexto que desafía, porque es un tiempo acotado donde todos los detalles importan, el contacto físico, el explicar el procedimiento y hacer sentir al otro que está acompañado.
Sobre la labor en la UPCA, Jessica Peña y Ana Jara, compartieron con nosotros la importancia de contar con una unidad que vele por entregar una atención humanizada, haciendo participar a los familiares en el cuidado con una infraestructura que facilite este trato humanizado, y que ayude a dignificar a la persona en los momentos de más vulnerabilidad.
Teresita Farías, de Oncología, nos mostró el flujo que experimenta el paciente y cómo los TENS, con profesionalismo y cariño, se preparan previo a su ingreso y luego acompañan al paciente durante toda su experiencia de hospitalización, aclarando dudas y educando a quien estará vinculado a la unidad y personal durante todo su proceso de enfermedad.
Finalmente, en el conversatorio, se discutió la importancia del trabajo en equipo, el apoyar a otro TENS, y que la compasión también debe ser entendida hacia el compañero de trabajo. Nos hicieron una generosa invitación a vivir la compasión en el día a día.
Quiero agradecer esta gran jornada a cada uno de los expositores, sabemos que no es fácil pararse delante de un grupo y compartir su trabajo, y finalmente a cada uno de nuestros TENS que se sienten comprometidos con su desarrollo profesional, con sus pacientes y con la Clínica. Los invito a seguir creciendo en el cuidado técnico y formación humana para ser mejores profesionales y personas.