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29/12/2022

Nuestros equipos: Centro del adulto mayor

Tatiana Giacomozzi es la enfermera coordinadora, cuyo rol es ser el enlace entre pacientes y un equipo multidisciplinario.

La geriatría se encarga de las personas mayores en todas sus dimensiones y, con premisa como foco, en el Centro de Adulto Mayor, acompañan, guían, asesoran y tratan a los pacientes ambulatorios y hospitalizados, junto a sus familias.

Esta unidad está conformada por geriatras, psicólogos, neuropsicólogos, kinesiólogos, fonoaudiólogos y terapeutas ocupacionales, además del apoyo de otras especialidades médicas.

Quien está a cargo de la coordinación de las áreas, especialidades y programas relacionados, es la enfermera Tatiana Giacomozzi. “Mi rol es ser el nexo entre el paciente y el resto del equipo o de otras áreas de la Clínica. Yo coordino, acompaño y guío, tanto en atenciones de salud -consultas, exámenes, hospitalización-, como en cuidados generales, en la casa y en la educación a pacientes, familias y cuidadores, incluso si la persona tiene una red de apoyo frágil, se intenta gestionar la activación de redes disponibles. Es parte de mi rol la valoración integral de los pacientes de nuestros programas como de aquellos pacientes hospitalizados”, explica.

El trabajo de enfermería en este Centro tiene estrecha relación con varias áreas de la Clínica, ya que las personas mayores tienen muchas morbilidades, por eso, se apoyan, por ejemplo, en las enfermeras a cargo de otros programas como los de piso pélvico, diabetes, heridas y ostomías, neurociencias, cardiología, cuidados paliativos, traumatología y paciente regional.

El trabajo diario de enfermería 

Tatiana cuenta que, en las mañanas, comienza con los pacientes hospitalizados que ya están a cargo del equipo o por interconsulta en geriatría. “Cuando otros especialistas sienten que su paciente necesita una mirada y valoración integral, nos llaman. Yo realizo la evaluación de enfermería del paciente. Una vez que se va de alta, se hace seguimiento telefónico al paciente, a la familia o al cuidador para revisar juntos las indicaciones o aclarar las dudas que puedan tener. Ellos saben que pueden llamarme para lo que necesiten”, asegura.

En tanto, con los pacientes ambulatorios tiene una relación muy cercana y cotidiana: “Para las personas mayores es muy importante tener a quién recurrir, muchas veces me piden ayuda con algo que no está relacionado directamente con mi trabajo, pero soy su apoyo en la Clínica. También, las gestiones pueden ser difíciles, por eso se las facilito o lo hago por ellos si es necesario. Entonces, pasan por mí cuando tienen dudas en torno a las consultas del Centro o de otras especialidades, en la realización de exámenes, para la toma de horas siguientes. Y trato de coordinarles todo el mismo día para facilitarles la atención”.

Para el equipo, el rol de enfermera de enlace asegura que el paciente está acompañado y guiado en los diferentes procesos en la Clínica.

Tatiana también cuenta que se está trabajando en la implementación de tres programas ambulatorios: uso de medicamentos, memoria y caídas, en los que ella hará la valoración geriátrica integral para que luego los pacientes ingresen al indicado.

“Tener un Centro de Adulto Mayor, responde a la epidemiología mundial actual, estamos envejeciendo, eso es un hecho, por lo que hay que ocuparse”, finaliza Tatiana.