13/07/2022
Por: Dra. Paula Guzmán
Jefa del Servicio de Pediatría
El trabajo en conjunto de diversas unidades y servicios ha permitido otorgar la atención necesaria.
Como Servicio de Pediatría siempre hemos estado acostumbrados a anticiparnos y programarnos para el invierno, porque sabemos que en esta época aumentan en forma considerable los casos de bronquitis y neumonía por virus respiratorios en niños pequeños, provocando una alta demanda de consultas y un aumento en las hospitalizaciones.
Sin embargo, sabíamos que este año iba a ser diferente a lo habitual. Durante los dos años de pandemia los niños casi no estuvieron expuestos a los virus respiratorios habituales, por lo cual el riesgo de tener un aumento considerable de infecciones respiratorias, mayor a lo que estábamos acostumbrados, era muy grande.
Y pasó lo que temíamos. A finales de mayo, comenzaron a llegar al Servicio de Urgencia niños complicados con bronquitis y neumonía, y muchos de ellos necesitaban hospitalización tanto en camas básicas como críticas.
Afortunadamente, hace meses que habíamos comenzado a trabajar en un plan que nos ayudara a abrir más camas de hospitalización básicas y críticas, pudiendo afrontar de la mejor manera posible la avalancha de pacientes hospitalizados.
Esto que suena tan sencillo fue un trabajo intenso para poder reclutar refuerzos de médicos, enfermeras y TENS tanto en Urgencia como en Hospitalización Pediátrica y en Unidad de Paciente Crítico. Además del refuerzo de todos los otros profesionales de la salud, como los kinesiólogos, cuyo trabajo es tan indispensable durante los meses de invierno. Y reunir todo el equipamiento e infraestructura necesarios para atender de la mejor forma a los pacientes.
Es muy importante mencionar que, a diferencia de la pandemia del año 2020, donde toda la Clínica se puso a disposición para atender pacientes COVID, y que nuestro Servicio de Pediatría y UPCP se tuvo que adaptar para atender pacientes adultos, al igual que otras Unidades y Servicios, esta campaña de invierno 2022 tuvimos que realizarla con el tope de la ocupación y actividad, por lo que no fue fácil lograr aumentar la capacidad. Pero, gracias al trabajo en conjunto del Servicio de Pediatría con las direcciones médica, de enfermería y desarrollo, logramos realizar un buen trabajo y sortear de la mejor manera posible los problemas que fuimos viendo en el camino.
Además del trabajo realizado en conjunto con la Dirección, es importante destacar que el éxito de la campaña de invierno se produjo por dos factores fundamentales. El primero tiene que ver con las buenas relaciones humanas y de amistad que siempre hemos tenido entre Urgencia, Centro Médico, Hospitalización Pediátrica y UPCP, tanto en la parte médica como de enfermería. Si no tuviéramos este trabajo previo, hubiera sido muy difícil lograr acuerdos y trabajar en conjunto para sacar adelante este gran desafío.
El segundo es recalcar la enorme ayuda de todos los pediatras de la Clínica, quienes estuvieron a la altura de las circunstancias desde el primer momento, reforzando turnos de urgencia, de hospitalización pediátrica, de intensivo y también ayudando en el refuerzo de la consulta pediátrica, en donde pusimos horas a disposición de pacientes agudos para así no colapsar el Servicio de Urgencia.
Ha sido una etapa bastante intensa, en trabajo y organización, y no exenta de problemas que hemos ido solucionando en el camino. Aún estamos lidiando con una alta demanda de pacientes con virus respiratorios, pero tenemos la tranquilidad de estar haciendo las cosas bien. Solo esperamos que termine con éxito este periodo para poder descansar del invierno y el próximo año volver a ponernos a trabajar en una nueva campaña de invierno 2023.