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12/04/2022

Lado B: “Es una experiencia muy completa y llenadora desde el punto de vista espiritual y físico”

El Dr. Giovanni Carcuro, traumatólogo especialista en medicina deportiva, participó en Fireflies un evento de ciclismo que busca apoyar a los niños con cáncer.



Hace aproximadamente 8 años que el Dr. Giovanni Carcuro practica ciclismo. Comenzó con bicicleta en Mountain Bike en unos cerros cercanos a su casa, pero a poco andar se fue entusiasmando y hoy es su principal actividad recreacional y deportiva, su lado B.

De hecho, hace poco vivió de una de las experiencias más lindas que le ha dado este pasatiempo: el evento deportivo y social Fireflies Patagonia 2022. Entre el 3 y el 13 de marzo, participó del ride más extremo del mundo, recorriendo en bicicleta lugares como Lago Yelcho, Coyhaique, Cerro Castillo, en la región de Aysén, y diversos caminos de la Patagonia chilena. “Fireflies es un evento que mezcla lo social y lo deportivo, sin el estímulo de querer obtener un triunfo deportivo, sino que solo la motivación de tener la oportunidad de visibilizar, dar un apoyo económico y simbólico a los niños enfermos de cáncer, a través de la fundación Vivir Más Feliz”, explica.


El Dr. Carcuro fue uno de los 22 seleccionados, entre cientos de postulantes, para participar en este evento. Cuando se enteró que había quedado, comenzó el entrenamiento, pues si bien es un deporte que practica habitualmente, debía prepararse para muchos días seguidos de bicicleta y en rutas complicadas. Junto con eso, nos explica que se corre en una bicicleta de Gravel que se utiliza en tierra, muy diferente al ciclismo de ruta que significa andar en pavimento. De esta forma, tuvo que participar de muchas carreras previas como parte del entrenamiento y la preparación. Aunque el objetivo final fuera que todo el grupo complete el recorrido, sin un marcaje, se requería de un nivel de disciplina importante.


Recorrió durante 10 días más de 100 kilómetros diarios en su bicicleta. Enfrentando caminos con condiciones adversas, grandes ascensos, fuertes lluvias, viento y frío. “Obviamente cuando uno está en un ambiente adverso, con condiciones del clima extremas, faltan fuerzas en las piernas para mover la bicicleta, te empiezan a jugar un poco en contra los pensamientos. Pero es ahí donde no hay que olvidar nunca el objetivo, que es pensar el esfuerzo que realizan todos los días los niños con cáncer para recuperarse de su enfermedad. Junto con eso, la propia familia hace tener fuerzas para salir adelante. Uno recuerda a personas que han sufrido, que han estado enfermas, porque, así como el cáncer, también hay enfermedades que son tanto o más terribles y que le han tocado vivir a nuestro entorno. Es ahí donde uno dice: si ellos pudieron salir adelante, o perdieron la pelea, yo no puedo flaquear”, explica.


Otro de los aspectos que tiene el ride es que durante el recorrido visitan diferentes colegios rurales que se encuentran en zonas muy aisladas del resto del país.  El objetivo es que los ciclistas pueden compartir con niños que tienen diferentes necesidades.  “Fireflies es una experiencia muy completa y llenadora desde el punto de vista espiritual y físico, y haber tenido la oportunidad de participar me llena de satisfacción”.


Luego de relatarnos sobre esta increíble experiencia, el Dr. Carcuro nos enfatiza sobre la importancia de tener un lado b. “Creo que tener una válvula de escape inevitablemente trae beneficios en el desempeño laboral. Esto es un beneficio personal obviamente, desde todo punto de vista, tanto mental como físico, pero está bastante demostrado que el deporte y las actividades paralelas disminuyen todos los riesgos de tener muchas enfermedades. Además, te permite concentrarte en entregar el mejor tratamiento y la mejor calidad de atención para todos nuestros pacientes"