03/10/2022
Contamos con equipos de última generación en terapia de cabina, localizada y luz excimer.
Recientemente, el Servicio de Dermatología sumó tres nuevos equipos de fototerapia, tecnología que utiliza energía con cierta longitud de onda -UVA y UVB- para tratar patologías inflamatorias como psoriasis, dermatitis atópica, linfoma cutáneo, vitiligo, entre otras.
Si bien constituye un tipo de tratamiento que, en su gran mayoría, se utiliza para enfermedades dermatológicas, también tiene utilidad para otras especialidades, como reumatología, oncología, nefrología y hepatología, entre otras.
Al respecto, el Dr. Fernando Valenzuela, dermatólogo de la Clínica y quien está a cargo de estos equipos, explica que la fototerapia se ha utilizado en los últimos 60 años con gran éxito porque permite un manejo adecuado de enfermedades con resolución en tiempo corto y con pocos o nulos efectos secundarios. Además, no requiere ningún examen de laboratorio antes, durante ni después. Asimismo, es posible controlar por periodos más largos y de remisión de 2 a 6 meses, sin necesidad de usar otras terapias.
El especialista agrega que “hay muchas enfermedades que se tratan con fototerapia, incluso hoy, cuando han aparecido fármacos biológicos o nuevas moléculas pequeñas que están revolucionando la forma de tratamiento. Esto porque tener acceso a una terapia sin efectos adversos sistémicos y con eficacia alta, deja a esta intervención como primera línea de tratamiento en múltiples afecciones cutáneas”.
En Chile, se encuentra disponible en la mayoría de centros públicos y privados dada su versatilidad. Incluso Fonasa e ISAPRES los reconoce como tratamientos médicos y permite codificación.
Los equipos disponibles son:
Cabina de fototerapia: donde se realiza PUVA terapia, tratamiento en que se utiliza un medicamento fotosensibilizante -psoraleno- oral o tópico, y después el paciente ingresa a una cabina donde permanece de pie y es expuesto a luz ultravioleta tipo A por algunos minutos. Se utiliza para linfoma de piel (un tipo de cáncer) u otras dermatosis con compromisos profundos (psoriasis severa, por ejemplo). También en la cabina se aplica UVB de banda angosta que es, en estos días, la terapia de elección en los casos de dermatosis más superficiales, ya que logra resultados comparables sin necesidad de ingerir ningún fármaco y con tiempos en la cabina más acotados. Esta tecnología se emplea para tratar vitiligo, psoriasis, dermatitis atópica, prurito, entre otras.
Fototerapia localizada: mediante un equipo más pequeño que se ubica en la zona a tratar, se puede hacer fototerapia con rayos ultravioleta A o B mediante un panel, utilizándose sobre todo en quienes tienen psoriasis en palmas y plantas de los pies o vitíligo facial extenso.
Fototerapia excimer: es una máquina más pequeña que emite rayos de luz ultravioleta tipo B con mayor potencia que las otras fuentes de fototerapia, para tratar zonas específicas sin exponer la piel circundante que está sana. Se usa, especialmente, para vitiligo y alopecia areata.
“Es importante contar con estos equipos porque nos permite ofrecer posibilidades de tratamiento no solo en dermatología, sino también en otras especialidades que nos pueden derivar a sus pacientes. Por ejemplo, en prurito por enfermedad renal o hepática que no pueden ser manejadas con otras intervenciones, o para linfoma cutáneo de células T (micosis fungoides) iniciales, en oncología”, afirma el Dr. Valenzuela.
Para utilizarlos, hay que comunicarse al mail fototerapia@clinicauandes.cl, donde la enfermera coordinará los pacientes derivados interna y externamente. En caso de que algunos tengan dudas o el diagnóstico no esté definido, los pacientes serán evaluados por el Dr. Valenzuela quien, además, les explicará el procedimiento, los tiempos y objetivos del tratamiento.