banner_principal

07/09/2022

Nuevos desafíos en IAAS

La Dra. Paola Pidal, médico jefe de la Unidad, nos habla de su llegada a la Clínica y del tema que la mantiene ocupada por estos días: la importancia del uso racional de antibióticos.

En junio de este año, asumió como Médico Jefe de la Unidad de IAAS la Dra. Paola Pidal, microbióloga y Magíster en Infección Intrahospitalaria e Epidemiología Hospitalaria. A pocos meses de haber llegado a nuestra Clínica, nos cuenta sobre los desafíos que presenta esta área y ahonda en la importancia del correcto uso de antibióticos, tema de preocupación sanitaria a nivel mundial

¿Qué desafíos o proyectos nuevos tiene IAAS? 

Este año, el Minsal ha actualizado la Norma de Vigilancia Nacional de IAAS, incorporando una serie de cambios que debemos incorporar y que en algunos aspectos es altamente exigente. 

En la Clínica mantenemos tasas de infecciones dentro de umbrales esperados, lo que esperamos mantener, a pesar de cambios epidemiológicos u otros aspectos que pudieran aumentar su riesgo. Para logarlo, es importante avanzar en una vigilancia sistemática de procesos claves en la prevención, así como en la estandarización de procesos. 

La pandemia de COVID-19 ha dejado de manifiesto la necesidad de contar con un plan de preparación para eventuales emergencias de salud pública, que nos permita rápidamente generar acciones para prevenir la diseminación de infecciones en pacientes y personal de salud.


Uno de los temas de IAAS de preocupación a nivel mundial es la resistencia a los antibióticos, ¿por qué es considerada una amenaza para la salud? 

La capacidad evolutiva de los microorganismos les ha permitido adaptarse y hacerse cada vez más resistentes, lo que ha complejizado el manejo terapéutico. Si bien la resistencia a los antimicrobianos es un fenómeno natural, esta se ve acelerada por el mal uso y abuso de estos. Su utilización masiva a nivel humano y en animales constituye una presión selectiva para el surgimiento de bacterias resistentes lo que, asociado a su capacidad de diseminación, supone una amenaza mundial a la salud pública, y así lo ha planteado la OMS. 

¿Cómo es la realidad en Chile y qué medidas se han tomado a nivel ambulatorio? 

Distintas publicaciones en países de altos ingresos estiman que un 30 a 40% de las prescripciones de antimicrobianos en pacientes ambulatorios son inapropiadas, al igual que alrededor de 30% de días de terapia antimicrobiana en hospitales.

En Chile, no se conocen estudios al respecto, pero sí se sabe que su consumo ha aumentado en las últimas décadas. Desde 1999, una regulación establece la venta de antibióticos bajo receta médica, medida que fue exitosa en disminuir las ventas en farmacias privadas. Sin embargo, en los años posteriores se produjo un alza en el consumo asociado a la prescripción por parte de los médicos y odontólogos, pero no existen datos sobre la magnitud de la prescripción realizada por estos últimos. En Estados Unidos, se estima que es de un 10% y que, al menos, un 50% son inapropiadas o innecesarias.

En la Clínica, ¿qué desafíos se presentan al respecto? 

Se realizan localmente acciones destinadas a promover el uso adecuado de tratamientos antimicrobianos, sin embargo, nuestro desafío es incorporarlos dentro de un Programa de Optimización del uso de Antimicrobianos (PROA), y profundizar en la evaluación de prescripciones de antimicrobianos específicos; estandarización de su uso;  monitorización de la magnitud del uso de determinados antimicrobianos y de los niveles de resistencia, difusión y capacitación a prescriptores tanto a nivel hospitalario como comunitario, así como también actividades relacionadas con la comunicación de resultados tanto a la comunidad hospitalaria como a nivel central y desarrollo de actividades de investigación en el tema. 

Por otra parte, en una etapa más avanzada, sensibilizar y educar a la población general sobre la importancia del uso racional de antimicrobianos y la resistencia a dichos fármacos, sería un gran aporte a nuestra comunidad