Programa Enfermedades del esófago

Corresponde al primer programa especializado en Chile en el diagnóstico y manejo de las enfermedades que afectan al esófago. Su objetivo es mejorar la calidad de vida de las personas.

De las patologías que afectan al esófago, el reflujo gastroesofágico es el más frecuente en la población chilena. Muchas personas que tienen esta enfermedad, además de requerir tratamiento, necesitan seguimiento clínico y endoscópico de por vida.

Endoscopía Digestiva Alta diagnóstica y terapéutica: procedimiento que se realiza con un video endoscopio, a través de la boca, que permite observar la mucosa del esófago, estómago y duodeno. Puede detectar la presencia de inflamación en el esófago (esofagitis) u otras complicaciones, y permite tomar muestras de tejido (biopsia) ante la sospecha de Esófago de Barrett.

Además, este procedimiento permite realizar tratamientos como son la dilatación endoscópica -en caso de estenosis esofágica- o la erradicación del esófago de Barrett a través de ablación con radiofrecuencia, entre otros.

Radiografía con contraste Esófago-Estómago-Duodeno: bajo visión radiológica simple, y tomando un líquido contrastado, se puede apreciar la anatomía del tracto digestivo superior. Es útil para la detección y caracterización de las hernias hiatales y trastornos motores como la acalasia.

Scanner (tomografía computada).

Estudio funcional esofágico:

• pH metría 24 hrs.: realiza la medición de pH en el esófago, a través de una fina sonda que se instala en la parte inferior del esófago por un día completo, con lo que se determina cuándo y durante cuánto tiempo el ácido gástrico contacta la mucosa del esófago. La impedanciometría permite evaluar episodios de reflujo débilmente ácidos o no ácidos.
• Manometría Esofágica de Alta Resolución: examen que mide la funcionalidad del esfínter esofágico inferior (EEI) y la musculatura esofágica.

Cirugía: puede ser por vía endoscópica o Mínimamente invasiva (laparoscopía y/o toracoscopía), que consiste en realizar el procedimiento a través de pequeños orificios, lo que implica menos dolor postoperatorio y recuperación más rápida.

Prótesis endoscópica: consiste en la colocación de un stent a nivel esofágico por vía endoscópica para permitir el paso de los alimentos en los casos en que existe una obstrucción esofágica (estenosis).

Quimioterapia.

Radioterapia.