Lo que debes saber sobre la Salmonella
Es muy habitual que cada cierto tiempo se publiquen noticias sobre infecciones masivas por salmonella, sobre todo en celebraciones masivas como las de fin de año. Esto se da porque se relajan las medidas de higiene en la manipulación o conservación de alimentos, provocando diversas infecciones.
Una de ellas es la salmonelosis, patología producida por la bacteria salmonella, la que habitualmente vive en los intestinos de animales y humanos, y es liberada en las deposiciones. Asimismo, afecta al aparato digestivo y se genera por comer carnes, pescados, frutas, vegetales o huevos contaminados que están crudos o poco cocidos. En el caso de las verduras, se produce cuando durante el procesamiento tuvieron contacto con agua contaminada.
Al ingerir esta bacteria, pueden generarse síntomas entre las 8 y 72 horas después, y los más frecuentes son:
- Fiebre
- Diarrea
- Dolor abdominal
- Calambres en la zona abdominal
- Dolor de cabeza
- Náuseas
- Vómitos
- Diarrea
La Dra. María Luz Endeiza, infectóloga de Clínica Universidad de los Andes, explica que “el cuadro clínico por salmonella dura, aproximadamente, una semana y, cuando se detecta esta enfermedad, es muy importante controlar fundamentalmente la deshidratación. Una menor producción de orina, sequedad en la boca y la lengua son algunas señales de que existe ese cuadro. Tomar agua constantemente también es primordial para evitar posibles daños renales”.
La especialista agrega que, si bien la infección por salmonella no presenta grandes complicaciones, las guaguas, los niños y las mujeres embarazadas pueden tener mayores problemas, por lo que es importante acudir rápidamente a un centro de salud para seguir el tratamiento más indicado.
Para evitar esta infección, se recomienda:
- Consumir alimentos cocidos.
- Refrigerar y congelar las comidas de forma correcta. Por ejemplo, descongelar las cosas lentamente, ideal dejarlo en el refrigerador la noche anterior y no al sol. Asimismo, algo que ya fue descongelado, no debe volver a congelarse.
- Lavarse las manos antes de manipular alimentos, sobre todo después de ir al baño, manipular carne o tener contacto con animales.
- Guardar por separado las carnes y dejar los alimentos listos para comer o cocinados en la parte alta y los crudos abajo, para evitar contaminación.
- Al cocinar, también es importante evitar la contaminación cruzada, para eso se deben usar distintas tablas de cocina. Por ejemplo, en una de ellas se debe cortar la carne, y en la otra, las frutas o verduras.
- Al viajar a otros países, preferir comidas cocidas y siempre tomar agua embotellada.
El tratamiento consiste en mantener una dieta liviana, ingerir mucho líquido para estar hidratado y tener reposo. “En casos más complejos, es necesario usar antibióticos”, afirma la Dra. Endeiza.
Ante cualquier síntoma grave o de deshidratación, es muy importante acudir a un servicio de urgencia, para llevar a cabo el tratamiento lo más pronto posible y evitar complicaciones.