Clínica Universidad de los Andes / Noticia

Vacaciones: a evitar los accidentes más frecuentes en niños mayores de 4 años

Las quemaduras y asfixia son algunos de los principales peligros a los que están expuestos los menores, especialmente durante el verano.
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Las ganas de investigar y conocer el mundo no son ajenas a los niños, por eso, los padres deben estar atentos, principalmente durante las vacaciones, ante cualquier peligro que pueda afectar la salud y condición de sus hijos, ya que el sol, el agua y las actividades al aire libre, podrían provocar una situación desfavorable.

La Dra. Paula Guzmán, jefa del Servicio de Pediatra de Clínica Universidad de los Andes, califica a los accidentes de tránsito, caídas, quemaduras, asfixia e intoxicaciones como los riesgos más frecuentes a los que se exponen los niños mayores de cuatro años.

Aquí, algunas recomendaciones para prevenirlas:

Accidentes de Tránsito

La especialista es enfática en destacar la obligatoriedad del uso de la silla de auto hasta que el menor tenga un peso y talla que permitan el uso correcto del cinturón de seguridad, lo que ocurre alrededor de los 8 años. “En general, a partir de los 4 años ya pueden utilizar una butaca o alzador, a la cual se adapta el cinturón del auto” señala la Dra. Guzmán.

A partir de los 8 años, se debe educar a los niños sobre el uso obligatorio del cinturón de seguridad, ya que es la manera más eficiente de evitar muertes en caso de colisión.

Caídas

Este tipo de accidentes ocurren tanto dentro como fuera del hogar, ya que los niños empiezan a realizar más actividades y no tienen una noción clara frente al peligro, por eso, es aconsejable que utilicen un casco apropiado para su edad cuando anden en bicicleta, skate, patines, entre otros.

Quemaduras

Las quemaduras se dan principalmente por exposición inapropiada al sol o por la manipulación de elementos inflamables. Para la primera, la especialista recomienda “evitar los horarios de mayor exposición solar, usar factor de protección 50 o más y reaplicar después de que los niños están en el agua”. Con respecto a la segunda, se les debe enseñar a no manejar materiales de ese tipo y siempre supervisar a los menores si están cerca de algún aparato que pudiera ser inflamable.

Asfixia por inmersión

Aunque los niños demuestren destreza en el agua, siempre deben estar bajo la vigilancia de un adulto ante cualquier problema. Es fundamental el uso de chaleco salvavidas, sobre todo en los más pequeños, tanto en piscinas, lagos y playa, además de cada vez que se suban a una embarcación, independiente de si saben o no nadar. Es importante recalcar que los flotadores plásticos no son elementos de seguridad.

En las casas, es indispensable poner rejas alrededor de las piscinas, las que deben tener las siguientes características:

  • Rejas de un mínimo 1.50 m de altura.
  • Separación entre barrotes de no más de 10 cm, que no quepa la cabeza de un niño.
  • Debe tener una puerta con seguro o chapa en la parte superior.
  • No debe haber nada cerca de la reja que le permita al menor escalarla, como un piso, un juguete o una silla.
  • No dejar objetos atractivos, inflables, juguetes o nada que llame la atención en su interior, ya que el niño tenderá a ir a buscarlos.
  • Revisar los bordes de la piscina especialmente cerca de pilares, porque animales domésticos suelen hacer espacios por los que los niños pueden reptar y cruzar bajo las rejas.

Intoxicaciones

La Dra. Guzmán recuerda que no se debe dejar al alcance de los niños medicamentos, artículos de limpieza o cualquier otro producto tóxico. De ocurrir la ingesta de un elemento tóxico, se debe acudir de inmediato a un servicio de urgencia.

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